¿Alguna vez te ha pasado que comenzaste el año con todas las ganas y con toda la actitud del mundo, solo para ver cómo tus intenciones de cumplir tus propósitos se desvanecen a las pocas semanas? Bueno, pues debo decirte que no eres la única persona que ha pasado por esto. Si te has sentido …
¿Alguna vez te ha pasado que comenzaste el año con todas las ganas y con toda la actitud del mundo, solo para ver cómo tus intenciones de cumplir tus propósitos se desvanecen a las pocas semanas? Bueno, pues debo decirte que no eres la única persona que ha pasado por esto. Si te has sentido atrapado(a) en este ciclo, aquí encontrarás respuestas que te ayuden a entender porque pasa esto, pero más importante aún, qué puedes hacer para que este año que viene sea diferente y no volver a fracasar en el intento.
Se estima que solo entre el 8 y el 9% de las personas logra cumplir completamente sus propósitos de año nuevo, esto de acuerdo con un estudio de la Universidad de Scranton.
El simbolismo de los propósitos de Año Nuevo.
Al comenzar un nuevo año, muchas personas sentimos la necesidad de un «reinicio». Esta sensación de renovación inspira a muchos de nosotros a fijarnos metas personales. Los propósitos de año nuevo que nos ponemos son un intento de aprovechar ese optimismo inicial para crear cambios duraderos. Sin embargo, el 91% de las personas que se fijan estos propósitos no logra cumplirlos. ¿Por qué? A decir verdad, no hay una sola razón, pero desde mi experiencia como project manager, creo que puede deberse principalmente a la manera en que nos planteamos nuestras metas y también en nuestra falta de estrategia para alcanzarlas.
Las estadísticas no mienten.
Un estudio realizado por la Universidad de Scranton en Pennsylvania reveló que sólo el 77% de las personas que se fija propósitos de año nuevo siguen comprometidas con cumplirlos durante la primera semana de enero. Un mes después, esta cifra baja al 64%, y para el tiempo que llegamos a los seis meses, es decir, a mitad del año, solo el 46% sigue intentándolo.
Principales razones por las que no cumplimos los propósitos.
Aunque para mitad del año el 46% de las personas sigue intentando cumplir sus propósitos y esta sigue siendo una tasa significativa, la realidad es que la tasa de éxito no es tan alta, ya que de acuerdo con este mismo estudio de la Universidad de Scranton, se estima que solo un 9% logrará verdaderamente cumplir los propósitos que se había fijado a inicios de año. Esto puede deberse a tres factores clave: metas poco realistas, falta de seguimiento y la falta de un plan concreto.
A veces, nos ponemos metas ambiciosas como «voy a hacer ejercicio en el gimnasio todos los días», sin tener en cuenta algunos factores como nuestro tiempo, nuestros hábitos, nuestra condición o nuestra energía, por lo que nuestra expectativa estará muy lejos de nuestra realidad, y por lo tanto, puede ser más fácil desmotivarnos al ver muy lejano nuestro propósito cumplido.
El seguimiento nos ayuda a mantener control sobre los resultados y nos permite dividir una meta grande en pasos más pequeños y manejables. Sin estos puntos de control, es probable que nos sintamos abrumados y, eventualmente desmotivados por sentir que aún nos falta mucho para alcanzar nuestro propósito, lo cual aumenta las probabilidades de darnos por vencidos.
Muchas veces definimos objetivos que tienden a ser un poco ambiguos, por ejemplo «voy a bajar de peso», sin embargo no definimos el paso a paso concreto que nos permitirá lograrlo. Este plan concreto es importante porque nos permite mantenernos alineados con nuestras metas y en contacto con los pasos que necesitamos dar. Sin él, nuestros propósitos se vuelven metas sin dirección, aumentando la probabilidad de desertar en el camino.
Cómo transformar tus propósitos en metas alcanzables.
Para que este año sea diferente, te comparto algunas prácticas que pueden ayudarte a cumplir tus propósitos de forma más efectiva:
- Establece metas SMART: (Específicas, Medibles, Alcanzables, Realistas y con un Tiempo definido). Por ejemplo, en lugar de “ser más saludable”, puedes proponerte “hacer ejercicio durante veinte minutos, tres veces por semana”.
- Empieza de a poco: Sobre todo si se trata de introducir hábitos o actividades que frecuentemente no haces, el cambio no tiene que ser radical, sino que puede ser paulatino. Por ejemplo, puedes empezar por ejercitarte sólo 15 minutos diarios.
- Divide las metas grandes en pasos pequeños: Fijar metas parciales te permitirá ver avances y mantener la motivación con cada pequeño logro que vayas teniendo.
- Haz un seguimiento constante: Establece un sistema para revisar y medir tus avances semanal o mensualmente. Asi verás que realmente está progresando, incluso pequeñas victorias suman.
- Encuentra un sistema de apoyo: Compartir tus metas con amigos o buscar un coach puede ofrecerte el acompañamiento y el compromiso necesarios.
La importancia de un enfoque de autoconocimiento.
En My Henko Path, creemos que el autoconocimiento es clave para lograr una transformación significativa. Entender por qué deseas alcanzar una meta y cómo se alinea con tu propósito te ayudará a mantenerte en el camino. Cuando nuestros propósitos están conectados con lo que verdaderamente queremos, es más fácil hacer el esfuerzo necesario para alcanzarlos.
Este año, puedes hacer las cosas de manera diferente. No tienes que enfrentarte solo(a) a tus metas. Imagina cómo sería tener una guía y un apoyo que te ayuden a mantener la constancia y el enfoque, adaptando cada paso a tus necesidades y fortalezas personales.
¿Estás listo(a) para hacer realidad tus propósitos de Año Nuevo? Te invitamos a agendar una sesión de consultoría con nosotros en My Henko Path, donde trabajaremos en conjunto para construir un plan personalizado y adaptado a ti, para que finalmente puedas cumplir esos objetivos que tanto anhelas. ¡Haz que este año sea el comienzo de tu verdadero Henko Path!